La Universidad de Santander (UDES) se posiciona a la vanguardia en la incorporación de la inteligencia artificial en su programa de Derecho, un paso que no solo transforma la enseñanza, sino que también redefine el papel del abogado en la sociedad actual. En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, la UDES se compromete a equipar a sus estudiantes con herramientas innovadoras que les permitan abordar los desafíos del ejercicio profesional en el contexto contemporáneo.
El programa académico de Derecho se enfoca en ofrecer una sólida formación jurídica, humanística y ética, garantizando que los futuros abogados estén preparados para ejercer su profesión en beneficio de la sociedad. Además, se incentiva la capacidad analítica y crítica, permitiendo a los estudiantes interpretar los problemas sociales, políticos y económicos del país, así como comprender el impacto de las normas en la realidad. De esta manera, se inculca una plena conciencia del papel mediador y facilitador que cumple el abogado en la resolución de conflictos.
Recientemente, el 5 y 6 de septiembre, se realizó el XV Congreso Internacional de Teoría Jurídica y Derecho Constitucional en el auditorio mayor de la UDES, donde se abordaron diversas temáticas relacionadas con la inteligencia artificial y su relevancia en el ámbito jurídico. Este congreso reunió a destacados ponentes como María Marcos González, Humberto Terreno de Roca, Juan Carlos Díaz Restrepo y Juan Rafael Díaz Córdoba, quien representa al Ministerio de Justicia.
Los temas tratados incluyeron el derecho a la inteligencia artificial, sus implicaciones en el ejercicio del derecho y cómo esta tecnología se convierte en una herramienta al servicio de la justicia. La inteligencia artificial está transformando el panorama jurídico, ofreciendo nuevas formas de acceso a la justicia y optimizando procesos. Sin embargo, también plantea desafíos éticos que deben ser abordados tanto por jueces como por abogados. Es fundamental que las instituciones del Estado hagan un uso adecuado de esta tecnología, garantizando que no reemplace el juicio humano en la aplicación de las leyes.
La importancia de estos avances radica en que, al integrar la inteligencia artificial en la formación de los futuros abogados, la UDES no solo está preparando profesionales competentes, sino también innovadores que podrán liderar el camino hacia un sistema judicial más eficiente y equitativo.