La Universidad de Santander culminó recientemente un proceso de actualización del protocolo de prevención y atención en casos de violencia basada en género (VBG) y violencia sexual (VS), un proyecto que surgió como una idea dentro de las aulas y se convirtió en una experiencia con un gran impacto institucional.
El proyecto inició en las clases de Educación y Políticas de Género y Antropología, Sexualidad y Género, donde los estudiantes comenzaron analizando protocolos existentes y estudiando las políticas vigentes en la UDES. “Encontramos que uno de los elementos fundamentales era consolidar la información no solo en un protocolo, sino que este pudiera escuchar a la población que iba a hacer uso de este”, afirmó Judith Gualdron, docente encargada de uno de los cursos integradores.
Las primeras etapas incluyeron la revisión de documentos teóricos y grupos focales. Para Ana Jiménez, también docente líder, el trabajo permitió identificar áreas críticas: “Este proyecto integrador surge de una necesidad de la universidad, particularmente el comité de inclusión. Los temas centrales donde se ha evidenciado con urgencia la necesidad de puntualizar procesos mucho más claros es el tema de género y las violencias basadas en género. Aunque ya existía un protocolo, se demostró que era necesario actualizarlo para puntualizar procesos más claros.”
Los estudiantes no solo se involucraron en el análisis, sino que participaron activamente en actividades diseñadas para sensibilizar a la comunidad universitaria. Cleisy Orozco, estudiante de antropología compartió su experiencia: “Al principio era de esas personas que no tenía idea de que existía un protocolo, pero durante las clases pude comprender y ver más allá. Fue increíble conocer las diferentes perspectivas y las respuestas en los grupos focales que realizamos.”
El proyecto también buscó generar materiales de divulgación que visibilicen la importancia de prevenir la violencia de género. “Mostrar lo que fue este proceso ayuda a que los estudiantes conozcan el protocolo y que se sientan respaldados por una universidad que realmente se preocupa por su bienestar”, afirmó Julieth Gaona, estudiante de Comunicación Social y Periodismo.
Con esta actualización, la UDES refuerza su compromiso con la prevención de la violencia y marca un precedente claro sobre cómo integrar el trabajo académico con el impacto social dentro del campus.
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