«Todo el tiempo lucho constantemente para poder levantarme de la cama, hacer cosas cotidianas. Siento que nada es suficiente. Se me cae el cabello. Hace algunos años me autolesionaba e intenté varias veces suicidarme”, así se refiere María*, de 21 años, quién padece de trastorno depresivo con el cual lucha desde el 2015.
María es una de las 554 personas que en Bucaramanga cada semana acuden a instituciones especializadas para la atención y cuidado en términos relacionados a la salud mental, así como apoyo e intervención en tratamiento de problemas de depresión, trastornos psicológicos y ansiedad, según el Ministerio de Salud.
El panorama de la salud mental presenta una serie de desafíos y oportunidades para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. De este modo, la Secretaría de Salud de Bucaramanga en colaboración con entidades de salud mental y organizaciones comunitarias se han puesto en marcha con una serie de estrategias para promover el bienestar psicológico de los ciudadanos.
Una de ellas es la implementación de programas de atención y prevención en las instituciones educativas y en los lugares de trabajo. De esta manera, El Plan de intervenciones colectivas busca la promoción de la salud y gestión del riesgo, las cuales se enmarcan en las estrategias definidas en el Plan Territorial de Salud (PTS). Algunas también van a orientadas a estrategias pedagógicas, articuladas con en el Comité de Convivencia Escolar.
De acuerdo con la Subsecretaria de Salud, Laura Milena Parra, se vienen desarrollando dos espacios de formación: Bienestar Emocional y Formador de Formadores, donde se trabaja con las figuras que son significativas en las instituciones educativas. De esta forma se busca sensibilizar a los estudiantes, maestros y empleados sobre la importancia de cuidar la salud mental y brindar herramientas para que puedan identificar signos de alerta y tomar medidas preventivas.
Para María* este tipo de programas le resultan benéficos pues hace 7 años cuando tuvo trastorno depresivo hubiese querido contar con estas ayudas: «En mi caso me hubiera gustado un proceso de acompañamiento desde mi colegio, ya que tuve que esconderme a través de los libros o especialistas en línea con publicaciones que me ayudarán a superarme o controlando mis ataques de ansiedad o depresión, así como leyendo cosas de psicología, por que nadie entendía lo que realmente me sucedía».
Por su parte, la psicóloga Liliana Torres Lozano, detalla que la forma en que las personas hablan sobre la salud mental también puede tener un impacto significativo en cómo perciben y abordan los problemas emocionales: “Debemos quitarnos esa estigmatización de que el psicólogo y el psiquiatra es para personas que están locas. Todos los seres humanos tenemos un grado de locura, porque esa es la esencia de nuestra vida”.
Es por esto que es importante que la sociedad en conjunto tome conciencia de la importancia de la salud y de la necesidad de cuidarla y promoverla.
Enfoque Digital Media Lab trae 10 recomendaciones para mejorar o tratar la salud mental, de acuerdo con Colegio Colombiano de Psicólogos:
1. Diseñar una rutina flexible que le permita equilibrar actividades académicas, laborales y de ocio.2. Conservar patrones de sueño saludables entre 6 y 8 horas al día, teniendo en cuenta medidas de higiene de sueño: no tomar bebidas oscuras después de la mitad de la tarde, tomar una ducha de agua tibia de 2 a 3 minutos evitar la luz blanca al momento de dormir (celulares, televisor, Tablet),leer con luz cálida (amarilla). 3.Realice ejercicio físico moderado e incluyendo ejercicios de meditación en la rutina diaria. Al menos 30 minutos de actividad regular que incluyan activación cardiovascular, estiramiento, resistencia y fuerza. 4. Evitar ingerir sustancias que alteren el funcionamiento mental. No consumir alcohol, no consumir sustancias psicoactivas. 5. Establezca espacios de comunicación efectiva con integrantes de la familia, promoviendo la expresión emocional y abordaje de conflictos que surjan durante el periodo de aislamiento. 6. Evitar discusiones y confrontaciones. No estar de acuerdo con alguien no implica molestarse, lastimarse o enfrascarse en discusiones. Tomar distancia, alejarse por un momento y respirar de forma tranquila, pausada y fluida. Una vez se sienta más cómodo, intente hablar de la situación sin utilizar juicios ni descalificar la conducta del otro. 7. Realice ejercicios periódicos de respiración para aquietarlos pensamientos y disminuir la intensidad de las emociones. 8. Escuchar música que ambiente sus emociones. Evitando la música a alto volumen y las canciones con contenido agresivo o violento. 9. Mantenerse en contacto telefónico o virtual con personas significativas. 10. Considerar opciones de diversas actividades para mantenerse activo durante el día (limpieza de la casa, lectura, cocina, actividades manuales y lúdicas) y si se encuentra en casa con otras personas, incluya actividades grupales.
2 comentarios
Me gusta ya que no todos tenemos el conocimiento de dichos programas que serían de gran ayuda ya sea para uno mismo o para un familiar
Buen articulo